Pues sí, este post va de pesimismo, y me temo que no estará a la altura de los otros.
Como habréis podido comprobar los problemas personales y los de quienes me rodean no me dejaban mucho tiempo para escribir aquí, pero eso no significaba que me hubiese rendido.
Sin embargo, un par de semanas especialmente duras, y algunas malas noticias me tenían el ánimo por los suelos.
Esta tarde, después de un terrible día, he llegado a casa y me he enterado que la lluvia, la tan deseada lluvia que tan bien nos ha venido en Madrid y en el centro (a pesar de los problemillas soportables que ha causado) se ha tornado en tragedia en otros lugares, como Lorca.
Esa tragedia ha tocado directamente a unos buenos amigos que mantenían con esfuerzo y tesón no sólo la web de Tesoros de la Marca, sino sus propias vidas y trabajos.
Los inmensos daños materiales, no personales que yo sepa, han dado al traste con sus vidas y con lo poco que me quedaba de ánimo.
No puedo siquiera imaginar cómo lo estarán pasando ellos.
Mañana será otro día de luchar y pelear, claro, pero hoy, no me quedan muchas fuerzas.