Los hongos se alimentan de criaturas muertas, descomponiéndolas y devolviéndoles al ciclo natural.
¿Pero qué ocurre cuando determinados hongos se alimentan de los cadáveres de no-muertos derrotados?
En ocasiones, algunos hongos acceden a energías y propiedades del plano de la energía negativa, animándose y tratando de devorar vidas.
Si la criatura es lo bastante poderosa, como un lich o un dios no muerto, se crea un vengador fúngico. Una poderosa criatura no muerta animada que conserva parte de los poderes y motivaciones de su anfitrión.