Me gusta imaginar futuros posibles.

Seguro que no estoy solo en esta tarea, pero es que además suelo integrar en ellos la visión de cómo va a afectar a esos futuros posibles la singularidad tecnológica.

En mi caso concreto, me gusta imaginarme futuro futuro como una matriz llena de posibilidades. A fin de cuentas la Singularidad lo que trata precisamente es de eso, de llenar de posibilidades nuestras vidas en el futuro.

Si seguís mis otros blogs, sabéis que la singularidad tecnológica, que se prevé para dentro de dos o tres décadas, conllevará una serie de cambios tecnológicos fundamentales que asemejarán nuestro mundo a los de ciencia ficción que los frikis siempre andamos soñando.

Viajes espaciales, inteligencias artificiales, vida eterna, realidad Virtual hiper realista, prácticamente todo será posible.

El problema de la singularidad, es que una vez llegue, el ser humano podría perder el control. Es mas si no logra integrarse correctamente en este futuro, podríamos pasar de un futuro utópico, aún no distópicos sin apenas darnos cuenta.

Algunas de las posibilidades para evitar este futuro consisten en integrarnos en la evolución de las máquinas, mediante implantes neurológicos, o nanotecnologicos.

Otras posibilidades consisten en lograr desarrollar una inteligencia general amistosa, que nos permita vivir con las máximas comodidades, en un mundo a nuestro antojo, mientras la propia singularidad se expande por el universo en pos de sus secretos.

Por supuesto, esta última opción, nos convertiría en poco más o menos que en los ancestros de los dirigentes del futuro, cuidados y respetados en el mejor de los casos y tolerados en el más probable de los futuros, como reliquias, antepasados que merece la pena conservar por razones antropológicas.

Sin embargo, esta vida tendría su lado bueno.

Vivir en la tierra, en una tierra sin escasez, con multitud de recursos, en la que han desaparecido el hambre, la destrucción medioambiental, la pobreza, y cualquiera de las carencias o problemas que nos ha quejan hoy en día, ella de por sí un premio de consolación que merece la pena.

Tampoco hace falta llegar a las singularidad para imaginar un mundo en el que los frikis viviríamos en un paraíso.

Imaginemos que en la futura de cada logramos implantar la economía circular, y realizar una transición completa a energías renovables baratas.

Imaginad también que conseguimos que los actuales procesos de inteligencia artificial mediante Deep Learning evolucionen y mejoren, y que se conviertan en una herramienta de aplicación diaria, ahora puede ser el almacenamiento en la nube o los teléfonos móviles.

De la misma forma, los nuevos materiales y la ciudades inteligentes nos permitirán vivir en edificios muchísimo más altos, pero que a la vez tengan muchas más comodidades que los actuales, lo que nos permitiría vivir en espacio mucho más amplios, con menor derroche, y con mayores recursos a nuestra disposición.

No es difícil imaginar que en ambos futuros podamos disfrutar de vidas que hoy consideramos imposibles. Y aparte por ejemplo aplicando inteligencia artificial a la traducción, maquetación y edición de libros, podríamos conseguir tener a nuestra disposición los textos traducidos de todos esos cientos de miles de cómics, libros y juegos de rol que hoy en día solo están disponibles en otros idiomas.

Si lo combinamos con un sistema de impresión bajo demanda, y con todo el histórico de materiales disponibles en la Internet, tendremos a nuestra disposición todo el vasto universo friki, a precios ridículos.

Es más, si las tecnologías de inteligencia artificial creativas siguen desarrollándose como hasta ahora, cosa que por el momento no parece muy probable, y son capaces de, utilizando miles de ejemplos, crear otros similares, no es difícil discernir un futuro en el que tendremos inteligencias artificiales creando juegos, libros juegos, libros y cómics específicos para nosotros.

Por otro lado, parece que nos acercamos a una edad en la que el fin del trabajo está cerca, tendremos mucho tiempo libre, por lo tanto dispondremos de tiempo para realizar aquellas tareas que nosotros queremos hacer porque nos gusten y nos apasione.Sin el peso de tener que dedicar 8 horas a trabajos extenuantes, seremos libreros, quiosqueros, músicos, escritores, ilustradores y todo aquello que seamos.

Me imagino yendo a mi librería de barrio, y recibiendo ahí cada día una remesa nueva de librojuegos y cómics nuevos, diferentes de los que recibiríais cada uno de vosotros.

Los recursos necesarios para ello no nos preocuparían, pues toda la energía sería renovable, y los recursos reutilizados y reciclados.

Dispondríamos también de una mirada de mundos de realidad Virtual en los que embebernos, de forma totalmente inmersiva y realista.

Y lo mismo con los War Games y juegos de figuras. Aquellas que diseñásemos con nuestra mente, tras interpretar la inteligencia artificial nuestros deseos, serían construidas en nuestra casa mediante impresoras 3D.

Como veis, un futuro lleno de posibilidades si lo que queremos es una vida tranquila y muy larga disfrutando de nuestro hobby.